He aquí la reseña sobre una película que desde ya se pronostica como una de las 2 o 3 favoritas para alzarse con los Oscars en Febrero/Marzo del 2011: "The Social Network".
Una noche de otoño del año 2003, Mark Zuckerberg, alumno de Harvard y genio de la programación, se sienta a su ordenador y con empeño y entusiasmo comienza a desarrollar una nueva idea. En un furor de blogging y programación, lo que comenzó en la habitación de su colegio mayor pronto se convirtió en una red social global (Facebook) y una revolución en la comunicación. Seis años y 500 millones de amigos después, Mark Zuckerberg es el billonario más joven de la historia... pero para este emprendedor, el éxito ha supuesto complicaciones personales y legales.
La película se presenta con sólo un gran nombre, el de su Director David Fincher (The Curious Case of Benjamin Button, Fight Club, Se7en), que ejecuta magistralmente un brillante guión. Es mi tipo de película debo confesar, un drama de tribunales, pero con elementos románticos y de comedia y sin el enfrascamiento de los típicos dramas legales.
Cuenta con un reparto de actores poco conocido, pero espectacular cada uno de ellos, sobretodo por Jesse Eisenberg en el papel de fundador de Facebook en una forma cruel y sarcástica; y el de Armie Hammer en el duro trabajo de interpretar a 2 gemelos. También destacables Justin Timberlake y Andrew Garfield.
La película además esta compañada de una buena partitura y de un muy cuidado apartado técnico, que va desde la cinematografía hasta el maquillaje, y que da un grato aire fresco a las temáticas y cualidades usuales de Fincher.
Los diálogos intelectuales rápidos y sarcásticos, colmados de insultos que algunos se agarran y otros te limitan a verlos pasar, ponen a mover las neuronas y despiertan el intelecto. El guión toca la violencia sin armas, la risa sin chistes, el amor sin tanto romance, abarca todo perfectamente.
La mejor escena de la película es por mucho una regata en el Támesis, con buena música y buenas tomas, me sacó al sombrero allí, justo en ese momento me hizo pensar: "De verdad ésto es una película de David Fincher, tan dinámica y sin Brad Pitt?".
La película es en líneas generales muy buenas pero no es para todo público, es para un público inteligente en mi opinión, pero simplemente le falta algo para mi total gusto, al fin y al cabo es un biopic y nunca va a tener ese giro inesperado en el guión.
Cruel, pero sincero. Ario.
8/10
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